Contenidos Voluntarios

¿Dónde quieres ir?

viernes, 18 de mayo de 2012

Por la escuela pública...

    ¿Qué decir del cole dónde en mi tercer año de carrera he podido hacer las prácticas?... tantas cosas!!Igualdad, cooperación, tolerancia, diversidad, trabajo en equipo... pero sobre todo... ganas de enseñar, ganas de aprender, y ganas de compartir todos estos conocimientos!!

    ¿Y del instituto donde tengo la suerte de trabajar desde hace ya tres años?Pues que... ¡¡ojalá sean muchos años más!!Porque lo mejor de esas aulas son los chavales que cada día las llenan... esos chicos y chicas que se forman, se intruyen y consiguen sus metas gracias a todos esos profesores que cada día se esfuerzan por hacerles llegar y saberles transmitir todos esos conocimientos que un día hasta lo más alto les haga subir...

    ¿Y qué mejor que encontrar este colegio y este instituto unidos en un mismo vídeo intentando alcanzar un mismo fin?...Mis chicos del tuto, ¡mis niños de prácticas!, muchos de los profes con los que compartí horas colándome en sus clases... ¡¡gracias por compartir lo que tan bien sabéis hacer!!

    Clara en su clase de primero, Carla en sexto o Manuela en infantil... nuestro huerto o nuestro patio... ¡¡son décimas de segundo las que cada imágen podemos ver!!pero esas décimas de segundo consiguen transmitir el trabajo diario de las personas, que aún creen en la educación...



POR UNA ESCUELA DE TODOS... ¡¡PARA TODOS!!

viernes, 4 de mayo de 2012

¿… Y si nos ratonizamos?


    ¿Qué es una de las cosas que más desea un estudiante de magisterio? Pues… ¡¡vivir la realidad de un aula!!, ver cómo es el día a día de niños y maestros, qué conflictos surgen, cómo se resuelven… ¡¡que razonamientos tienen los niños!! Porque… cada una de sus cabecitas tiene una manera distinta de pensar que casi siempre… ¡nos suele sorprender! Y esas tan esperadas prácticas, que puede ser que en ocasiones hayan supuesto más un quebradero de cabeza que lo que podríamos denominar como disfrute… ya tocan a su fin…

    Imagino que la proxima semana, tal que un viernes por la tarde, el ambiente se llenará de cierta tristeza, pues los niños y maestros que el primer día nos resultaron extraños, en el mejor de los casos, se han convertido ahora en compañeros de aventura con los que, al menos en mi caso, no solo me han enseñado y de ellos ha sido de quienes he aprendido, sino que, ¡¡con ellos me lo he pasado genial!!

    Y de esos momentos tan buenos surge el título de esta entrada: ¿Qué os parece si nos ratonizamos?, y es que dicho así, puede ser que pocas personas me vayan a entender, pero sí lo comprendereis cuando nombre el divertido libro que a Roald Dahl se le ocurrió escribir: “Las Brujas”…

    Si en algo se caracteriza el “cole” donde he pasado los casi tres últimos meses, es en dedicar gran parte del tiempo y esfuerzo por parte de los maestros a la lectura, ¡¡cosa que me encanta!!porque si alguien ha leído entradas anteriores que pueden encontrar en este blog, podrán comprobar que uno de mis “vicios” más confesables son… ¡¡los libros!!

    Pues bien… y volviendo a nuestras brujas: ciertos días a la semana, en ciertos momentos, el maestro lee un cuento a los niños… poniendo en práctica aquello que tan bien conocemos y que llamamos animación a la lectura, y curiosamente, el libro elegido en esta ocasión, hablaba de las brujas… 

    Su trama gira alrededor de un niño huérfano que, junto a su abuela (con quien vive en Noruega tras la muerte de sus padres), viajará a Inglaterra por cuestiones personales pero, tiempo después, ese viaje terminará siendo toda una aventura que les permitirá a ambos vencer a las brujas de aquel país. 

    Por lo general, estas hechiceras conviven con el resto de la población como si fuesen personas normales. Sin embargo, el día de la convención anual de brujas, demostrarán que no son tan pacíficas como aparentan al dar a conocer su propósito de eliminar a todos los niños de la Tierra, a través de una fórmula secreta capaz de convertir a los pequeños humanos en ratones.

    Nuestro protagonista, sin quererlo, es testigo de la reunión anual que estas brujas celebran en un hotel de la ciudad, y no sólo escucha cuál es la fórmula de ese extraño ratonizador sino que además, comprueba como un niño muy glotón es convertido en ratón sin sospechar que… ¡¡Y hasta aquí puedo leer!!No queramos descubrir, lo que promete ser un gran final…

    Pero… ¿qué relación tiene todo esto?, fácil… una de las brujas que Roald Dahl creó, se llamaba Beatriz, lo que se sumó a la curiosidad que ya de por sí, los niños sentían hacía mí… y las preguntas sobre mi edad no hicieron más que hacer aumentar un clamor general… “¡¡La profe de prácticas es bruja!!”… clamor que se prestó a hacer una divertida animación…

    Después de pactar  con los tutores de todo el primer ciclo de primaria el día y momento en que se haría la animación, y haciendola coincidir con la semana literaria… ¡¡todo estalló!!, y es que… efectivamente… la profe en prácticas se mostró como la bruja que creó el ratonizador y al “cole” lo llevó…




    Una siniestra biblioteca en la que las luces apagadas y las persianas cerradas, hacían relucir brillantes velas que sobre oscura tela se encontraban… y que iluminaban calderos y botellas, de cosas espeluznantes rellenas, era el escenario ideal para que la bruja se diese a conocer…

    Brebajes y pócimas esperaban a ser probados por los inocentes niños, que engañados por sus amados maestros, ¡¡allá fueron a aparecer!!, mientras la loca bruja no hacía mas que entre estridentes risotadas, sus conjuros exponer…



 

¡¡Magia potagia de pies a cabeza, este conjuro se enfrenta a las leyes de la naturaleza...!!
Pelos de araña y uñas de erizo, ¡¡¡son los ingredientes para este hechizo!!!
Legañas de zombi, medusas en salsa...
Lluvia de estrellas, polvo de mar, vientos polares, aurora boreal...
Brujas y hechiceras, ¡¡lo digo de veras!!, vienen por el mar, ¡¡en breve llegarán!!
Bebe mi brebaje y toma mi dulce chocolate, cuenta hasta diez... ¡¡y ratonízate!!

    Los niños, expectantes, veían como los conjuros y hechizos lanzaban espuma blanca y después  de rojo se teñían… observaban como esa bruja sin parar decía… “Un, dos, tres… ratonízate!!”, y veían como los compañeros más osados, probaban lo que parecía un rico zumo recién preparado…
   


    Mas la siniestra bruja al fin se descubrió… y gran risa a los niños causó el descubrir que tal bruja fea y mala no era otra que la profe de prácticas… y así fue como despedimos nuestra semana literaria, que con una gran gymkhana comenzó, pero esto es otra historia digna de ser contada en otro ocasión…

    ¿¿Y ahora??¿¿Que cómo me llaman por los pasillos del cole??... No lo dudéis, pues cien niños corean: ¡¡Bruja Bea que se te ve!!